lunes, 4 de noviembre de 2013

PASTA




               
Este es mi primer post de pasta, lo que quiere decir que aquí pondré todo lo que he aprendido sobre pasta en estos años.

Realmente prefiero consumir productos integrales, como lo es la pasta integral de la cual  ya había hablado en un post anterior: pasta integral, pero mis consejos aplican para cualquier tipo de pasta ya sea integral o no.

Existen muchos, muchos tipos de pasta y realmente no soy una experta en nombres de pasta pero según su forma podemos utilizarlas de diferentes formas por ejemplo: la de estrellas o letras que es típica en sopas con caldo, el espagueti va bien con verduras salteadas y salsas, la pasta de tornillos o coditos va bien con salsas, por su forma la salsa se guarda bien en esta pasta, también existen los canelones que es un tipo de pasta con forma de cilindro y la cual puedes rellenar o también la famosa lasaña que son láminas. Cada una nos brinda oportunidades diferentes y con un buen acompañamiento siempre serán deliciosas.

En mi experiencia la mejor manera de prepararla es en una olla grande poner una cantidad considerable de agua con sal, al probarla debe saber cómo a agua de mar, pero cuidado de no pasarse porque entonces la pasta quedará salada (lo digo por experiencia jeje). Se pone en la estufa y cuando este hirviendo se le agrega la pasta. Si quieres darle un poco más de sabor puedes agregarle al agua de cocción una o dos hojitas de laurel.

Yo no tengo un tiempo de cocción, prefiero estarla revisando a partir de los 15 minutos porque hay unas que se cosen más rápido que otras, pero ya que está la pasta lista solo es cuestión de ponerla a escurrir. 

Ojo con la pasta fresca ya que esta se cose más rápido que la seca que nos venden en el super, la pasta fresca se puede hacer en casa, si quieres hacer ravioles, que es pasta rellena necesitas hacer la pasta en casa para después rellenarla, pero de pasta fresca hablaré después.

Si la salsa que vas a preparar no es muy tardada puedes comenzarla a la par que coses la pasta, así cuando la pasta esté lista, la salsa también lo estará y tendrás las 2 cosas calientes. Si tu salsa es más elaborada puedes comenzarla un poco antes de poner a coser la pasta.

Si vas a guardar la pasta sin salsa en el refri lo mejor es ponerle un poco de aceite para que no se pegue y así puedas comerla sin que se haga un bloque inseparable de pasta. De esta forma puedes tener pasta lista varios días y preparar diferentes salsas para que no te aburras de comer de un solo sabor varias veces y mejor aún, prepara el doble de salsa y congela la mitad para usarla después.

La pasta la podemos usar fría o caliente. Si la usamos fría podrá ser en una ensalada con pollo, atún o solo verduras. Si la usamos caliente puede ser con tu salsa preferida o con algunas verduras salteadas y ajo.

El siguiente post será una receta con pasta, espéralo ;)